Dos cervezas sin alcohol al día consiguen aumentar los antioxidantes de la leche materna.
Esta es la conclusión de un estudio realizado por una pediatra valenciana que ha llevado a Bruselas al «VI Simposio Europeo en Cerveza y Salud», los resultados de un estudio que demuestran un mito que siempre supieron las abuelas. En el simposio han participado especialistas d ela Unión Europea en medicina, nutrición y alimentación, entre los que se encuntran varios españoles. El estudio se presentará en próximas fechas a nivel nacional. Su autora, la pediatra valenciana María Teresa Hernández Aguilar, adelanta a este periódico las conclusiones de un trabajo realizado por su equipo del centro de salud Fuentes San Luis.
La pediatra valenciana explica que ha demostrado que los niños amamantados por madres que consumieron dos cervezas sin alcohol durante la lactancia tiene menos posibilidades de padecer enfermedades como el cáncer o la arteriosclerosis, debido a la transmisión de los componentes antioxidantes de dicha bebida, lo que retrasa el envejecimiento.
En una alimentación sana, los antioxidantes se adquieren con las frutas, verduras, pescados, el vino y la cerveza.
La investigación se realizó con cuarenta mujeres, veinte de ellas amamantaron a sus hijos durante un mes sin tomar cerveza y otras veinte bebieron dos cervezas sin alcohol al día durante el mismo periodo. «La leche materna es muy rica en antioxidantes nada más nacer el bebé y va perdiendo esa propiedad con el paso de los días», asegura la pediatra.
El control se realizó en tres ocasiones, al nacimiento del bebé, a los quince días y al mes. Se realizaron controles de sangre y orina a la madre y al recién nacido, así como a la composición de la leche durante ese periodo de tiempo. «Los resultados fueron los que hemos mostrado. La leche de las madres que había bebido cerveza sin alcohol era más rica en antioxidantes durante más tiempo y el estado de los antioxidantes es mejora con la cerveza». Además, la cerveza también tiene benefico sobre la salud de la madre, que retrasa su estado oxidativo tras el nacimiento.
«El reto ahora es ampliar el estudio y comprobar si los resultados son los mismos con todas las marcas de las cervezas que hay en el mercado. En este caso la muestra fue ciega, es decir, los cerveceros repartieron las latas a las madres lactantes, pero desconocemos las marchas».
El estudio se ha realizado en colaboración con el Hospital doctor Peset y el laboratorio de Pediatría de la Facultad de Medicina de Valencia.
La Consejería de Sanidad ha organizado en la Comunidad la Semana de la Lactancia Materna, que se desarrollará en la provincia de León, La Bañeza y Ponferrada entre los día 2 al 8 de octubre, con conferencias en la que especialistas y grupos de apoyo actualizarán conocimientos y divulgarán los beneficios de la leche materna para la salud de los recién nacidos y para sus madres.
Esta es la conclusión de un estudio realizado por una pediatra valenciana que ha llevado a Bruselas al «VI Simposio Europeo en Cerveza y Salud», los resultados de un estudio que demuestran un mito que siempre supieron las abuelas. En el simposio han participado especialistas d ela Unión Europea en medicina, nutrición y alimentación, entre los que se encuntran varios españoles. El estudio se presentará en próximas fechas a nivel nacional. Su autora, la pediatra valenciana María Teresa Hernández Aguilar, adelanta a este periódico las conclusiones de un trabajo realizado por su equipo del centro de salud Fuentes San Luis.
La pediatra valenciana explica que ha demostrado que los niños amamantados por madres que consumieron dos cervezas sin alcohol durante la lactancia tiene menos posibilidades de padecer enfermedades como el cáncer o la arteriosclerosis, debido a la transmisión de los componentes antioxidantes de dicha bebida, lo que retrasa el envejecimiento.
En una alimentación sana, los antioxidantes se adquieren con las frutas, verduras, pescados, el vino y la cerveza.
La investigación se realizó con cuarenta mujeres, veinte de ellas amamantaron a sus hijos durante un mes sin tomar cerveza y otras veinte bebieron dos cervezas sin alcohol al día durante el mismo periodo. «La leche materna es muy rica en antioxidantes nada más nacer el bebé y va perdiendo esa propiedad con el paso de los días», asegura la pediatra.
El control se realizó en tres ocasiones, al nacimiento del bebé, a los quince días y al mes. Se realizaron controles de sangre y orina a la madre y al recién nacido, así como a la composición de la leche durante ese periodo de tiempo. «Los resultados fueron los que hemos mostrado. La leche de las madres que había bebido cerveza sin alcohol era más rica en antioxidantes durante más tiempo y el estado de los antioxidantes es mejora con la cerveza». Además, la cerveza también tiene benefico sobre la salud de la madre, que retrasa su estado oxidativo tras el nacimiento.
«El reto ahora es ampliar el estudio y comprobar si los resultados son los mismos con todas las marcas de las cervezas que hay en el mercado. En este caso la muestra fue ciega, es decir, los cerveceros repartieron las latas a las madres lactantes, pero desconocemos las marchas».
El estudio se ha realizado en colaboración con el Hospital doctor Peset y el laboratorio de Pediatría de la Facultad de Medicina de Valencia.
La Consejería de Sanidad ha organizado en la Comunidad la Semana de la Lactancia Materna, que se desarrollará en la provincia de León, La Bañeza y Ponferrada entre los día 2 al 8 de octubre, con conferencias en la que especialistas y grupos de apoyo actualizarán conocimientos y divulgarán los beneficios de la leche materna para la salud de los recién nacidos y para sus madres.
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