sábado, 15 de octubre de 2022

Mito de la charapa ardiente




El mito de la charapa ardiente, también denominada como el estereotipo de la mujer amazónica, es una creencia popular muy extendida que afirma que las mujeres peruanas oriundas de la selva amazónica presentan un nivel de libido desproporcionado y una actividad sexual alta.

sábado, 1 de octubre de 2022

Seshat, señora de los libros




Seshat, señora de los libros, protectora de bibliotecas, diosa de la escritura y la lectura. Diosa de la arquitectura, escriba de faraones, diosa del destino, mecenas de la contabilidad, de los censos…

Es imposible, para alguien que ama los libros, para quien sus momentos más recordados se encuentran entre las estanterías de una vieja biblioteca repleta de antiguos y modernos saberes, no sentirse inspirado por una diosa así. No sentir las ganas de perderse entre libros de mitología egipcia para investigar su historia, para conocerla, y si hace falta, adorarla.

¿Quién era Seshat?

Sesha, Sesheta o Safek-Aubi. Seshat para todos. Es de las más antiguas del panteón egipcio pues se la adora desde la Dinastía I, y se la conoció con diferentes nombres según las dinastías reinantes, y precisamente, según las épocas, también fue considerada diosa de uno u otro elemento, pero siempre con uno común: los libros.

Seshat era considerada como la parte femenina de Thot, bien como su hija o como su esposa, y como esta última tenían un hijo en común, Hornub, el Horus de Oro, por lo que también se le asoció a la diosa Isis.

En determinados escritos antiguos, como en el «Texto de las Pirámides», también se la relacionó con Neftis cuando la llamaron «Dama de la Casa», cuya traducción antigua derivaba precisamente en Neftis, del mismo modo que a esta, en ese mismo texto, la describieron como «Seshat, la más destacada de los constructores».

¿Cómo se representa a Seshat?

Seshat es uno de los dioses que no cuenta con templo propio, pero aún así, nos han llegado representaciones de ella en algunos que están asociados a otros dioses. Precisamente se la solía representar como escriba del faraón, anotando sobre las hojas del Árbol de la Vida, el árbol sagrado de Heliópolis, todos los logros que este había conseguido durante sus años de reinado, lo que le daba la cualidad mágica de cuidar de la inmortalidad del faraón en la Tierra.

Vestida con piel de leopardo, y con un tocado sobre la cabeza con una estrella de cinco o siete puntas, Seshat llevaba en sus manos como elementos simbólicos una caña de escribir y una paleta de escriba. También, en la caña, a veces se le representa con un pequeño renacuajo y con una hoja de palmera. Sobre la flor de estrella, en el tocado, ya un pequeño arco, o dos cuernos invertidos, como lo interpretan algunos historiadores, en relación a su esposo, Thot.

Otros simbolismos de Seshat en la mitología egipcia

Como diosa de los constructores, y desde la época Tinita, sus conocimientos adquirieron tintes celestiales. Como diosa del destino, estaba sentada a los pies del árbol cósmico, allí donde el cielo superior y el inferior se unían, y era encargada de calcular y dar la orientación precisa a la hora de construir y elaborar los planos de los templos. Como consejera del faraón en su construcción, incluso era partícipe de algunos ritos tradicionales de la época. Como «Señora de la Casa de los Arquitectos», desde la Segunda Dinastía, estaba asociada con el ritual del «pedj shes», la ceremonia de «estirar la cuerda» para medir las dimensiones de los edificios.